Los tiempos han sido difíciles y complicados últimamente, se siente como si todo fuera gris, hemos tenido muchas pérdidas y decepciones; no creemos que sea la primera vez que el Mundo sufre una situación como esta, no creemos estar viviendo la primera crisis, pandemia, guerra, hambre o descontrol, pero la pregunta es: ¿En estas circunstancias quién es tu refugio? o ¿cuál es tu lugar seguro?

Cuando las cosas no salen como esperas, pierdes lo imperdible, vives aquello que pensaste nunca vivir o vuelves a pasar por esa situación que fue tan complicada para ti ¿hacia dónde corres? ¿en qué te refugias? o ¿qué voces son las que oyes para que te den un consejo?.

Podemos ver una película que nos haga sentir bien, leer un libro, buscar a algún amigo, podemos encerrarnos en nuestro cuarto para que nadie nos moleste, llorar por horas, dejar de comer, jugar videojuegos, beber un rato, ir de fiesta, o hacer todo aquello que te han dicho que te perjudica para demostrar que “TÚ PUEDES”.

Pero de corazón creemos que cuando el silencio llega, la música deja de sonar, loa amigos se van, el cuarto se encuentra vacío, nuestro espíritu anhela desde el abismo más profundo La presencia de Dios... THE SOURCE, muy en el fondo algo dentro de nosotros clama por lo eterno, por algo que te llene cuando más vacío estás, que te traiga a vida cuando sientes que las fuerzas se acaban, que te sostenía cuando sientes que vas cayendo, que te de esperanza, alguien que te abrace tan fuerte que haga desaparecer todo al rededor, alguien que no le importe tu condición ni tus heridas.

Recordemos la historia de los israelitas cuando eran dirigidos por jueces que Dios mismo escogía y a los cuales se les revelaba y hablaba, era algo que solo muy pocos podían experimentar en ese tiempo, pero ellos no querían seguir siendo gobernados de esa manera, ellos querían un rey, alguien que los lideraba en la guerra, para que fueran como las naciones vecinas, lo que ellos no vieron fue que al pedir un rey como los demás,

estaban despreciando al mismo Dios, porque el era SU REY pero, aún así prefirieron ser iguales a los demás y tener un hombre como rey.

Y tú... ¿Quieres ser iguales a los demás? ¿Quieres una relación que te ayude a combatir esa soledad que sientes? ¿Quieres el estatus que las Redes Sociales “prometen”? o ¿quieres sentirte “especial” fuera de la identidad que Dios nos ha dado?. No seamos como los israelitas que tenían al Rey de reyes tan cerca y no fueron y conectarse con Él y encontrar aquello que tanto necesitaban y nadie más era capaz de dárselos.

¿Cuándo estás cansado a qué te conectas que te haga sentir mejor?

Lo que sea que estés atravesando, no importa que tan grande sea el daño, Dios puede lidiar con tu tristeza, tus preguntas, y el enojo que sientes. De hecho, Él quiere lidiar con ello. Quién es Dios y lo que Él posee es lo que necesitas SIEMPRE